La Comisión Nacional de Territorios Indígenas (CNTI) y nuestra emisora Ka’tikunsi – La Voz de los Territorios participaremos en la COP30, la trigésima Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), que se celebrará en Belém, en el corazón de la Amazonía brasileña, del 10 al 21 de noviembre de 2025.
La participación indígena, esencial para las decisiones globales
La participación de los Pueblos Indígenas en la COP30 es fundamental para que las decisiones globales sobre la crisis climática reconozcan nuestros derechos territoriales y colectivos, valoren los sistemas de conocimiento propio y comprendan el papel como custodios de la vida y portadores de soluciones vivas y reales para el cuidado de la Madre Tierra.
Celebrar esta cumbre en un territorio que alberga el 20% del agua dulce del planeta y más de 100.000 millones de toneladas de carbono convierte a la COP30 en una oportunidad histórica para visibilizar el papel de los Pueblos Indígenas como guardianes ancestrales de la Amazonía, hoy amenazada por la expansión extractiva y la crisis climática.
Pueblos Indígenas: custodios de la vida
En el mundo existimos más de 476 millones de Pueblos Indígenas, presentes en más de 90 países, habitando territorios que concentran la mayor parte de la biodiversidad del planeta. Nuestra relación con la tierra, el agua, el aire y los seres que los habitan es espiritual y relacional: el territorio no es un recurso, es un ser vivo del cual hacemos parte.
Los Pueblos Indígenas comprendemos de forma integral las crisis que enfrenta la humanidad —cambio climático, pérdida de biodiversidad y desertificación— como expresiones de un mismo desequilibrio. Por eso, exigimos que sean abordadas de manera conjunta e integral con soluciones colectivas, coherentes y verdaderas.
Guardianes de la Amazonía y soluciones vivas
En la Amazonía, más de 500 naciones indígenas, incluidas 188 en aislamiento voluntario, han protegido la selva durante milenios. Sus sistemas de conocimiento, espiritualidad y prácticas tradicionales han permitido que este bioma siga siendo uno de los principales sumideros de carbono del planeta y fuente vital del 20% del agua dulce mundial.
Experiencias como los sistemas agroforestales integrados, la gestión comunitaria del territorio y las formas propias de gobernanza demuestran que los Pueblos Indígenas ofrecemos soluciones concretas, justas y efectivas frente a la crisis climática.
Defender la Amazonía implica reconocer jurídica y políticamente al territorio integral como sujeto vivo, un ser que alberga relaciones, responsabilidades y obligaciones compartidas. Urge construir políticas públicas que garanticen su integridad ecológica, cultural y espiritual, junto con mecanismos de consulta, control territorial y gestión comunitaria.
Hacia una política climática justa y coherente
Los Pueblos Indígenas exigimos que nuestros voces, derechos y sistemas de conocimiento sean parte activa de las negociaciones internacionales y de las políticas nacionales. Reconocer su papel histórico y actual en la protección de la Amazonía no es un gesto simbólico, sino una condición para la sostenibilidad del planeta y el futuro de la humanidad.
La COP30 será un verdadero hito solo si garantiza la participación plena y efectiva de los Pueblos Indígenas en la gobernanza climática, con representación real, financiamiento directo y mecanismos de incidencia propios dentro de los espacios formales de decisión de la CMNUCC.
Desde la CNTI reafirmamos que los Pueblos Indígenas no solo somos parte de la solución, somos la respuesta viva frente a la crisis climática.
¡Defender los territorios es defender la vida!
¡La respuesta somos nosotros!






